Leer un cuento a un niño es uno de los mejores regalos que se le puede hacer.
Leer un cuento es un momento mágico en el que cada uno se prepara: ¿estamos cómodos y bien sentados?, ¿estamos calladitos?…¡ estamos expectantes!!
Aunque ese cuento se le haya leído muchas veces, cada vez que vuelve a abrirse se entra de nuevo en un mundo mágico que alberga unos personajes que poco a poco han ido haciéndose sus amigos y con los que vuelve a vivir una aventura.
El niño con sus padres, sus abuelos, sus tíos, sus hermanos o sus profesores están atendiendo a lo mismo y aprendiendo a estar tranquilo, a imaginar, a prestar atención y a sentir.
Aprende a ponerse en el lugar del otro y a entender en los protagonistas emociones que en él le cuesta ver y ponerles nombre. Aprenden a enfrentarse al miedo, al enfado , a la tristeza, la alegría y la tranquilidad. Y también aprende a cómo relacionarse con los demás.
Reciben mensajes que de otra forma no podrían comprender, sobre todo en situaciones de mucha tensión emocional como puede ser la llegada de un hermanito, un cambio de casa, el viaje de alguno de sus padres, etc.
También aprenden a conocer el mundo y muchas nuevas palabras.
Leer un cuento a un niño es un regalo además porque se lo lee alguien muy especial, alguien que le dedica su tiempo y su amor en exclusiva, porque en ese momento no va a coger el móvil o pensar en otra cosa.
Hay muchos cuentos que contar a un niño y muchos buenos ratos que compartir con él.
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